Se me ocurrió


Se me ocurrió ver un cementerio en una terraza y comparar sus
tejados, las azoteas, sus muros de proyección cinematográfica, espadañas, pequeñas cúpulas, sombras que parecen humanas y sin embargo quietas, luces y cruces de muchas antenas, todo un laberinto dispuesto a perderse y protegerse en el suave viento que también hace mover unos pequeños ramajes allá arriba, como los cipreses en los cementerios, donde hay nombres de mucho frío y caminos y caminos y calles y nichos, panteones, cal, desconchón y una larga extensión hacia una imagen que yo vi y que me hace aún más fea.